viernes, 11 de marzo de 2011

Último día en Granada


Para visitar la Alhambra lo que deberíais hacer es reservarla por internet, porque sobretodo en fin de semana corréis el riesgo de quedaros sin plaza, sinceramente, os recomiendo la visita general, porque la Alhambra no solo son los palacios nazaríes hay unos preciosos jardines, está el palacio de Carlos V el generalife con sus excelentes vistas, el alcazábar y merece la pena entrar a todas partes. El precio de la general son 13 euros fijos.
Acabada ya la visita a la Alhambra comimos en un restaurante al lado del mirador de san Nicolás donde tocaron delante de nosotros unos alegres gitanos Los Pelis, la verdad los he buscado en youtube y no ha habido resultado.

Pateamos el Albaicín, esas calles estrechas con paredes blancas que parecen laberínticas y tomamos la Florecilla y yo los dos últimos tés en la calle de las teterías.



Espero que si pensáis visitar Granada no dudéis en hacerlo, nosotras volveremos que queremos ver el Sacromonte, más pueblos de las Alpujarras, y por supusto a grandes amigos granadinos que nos regalan sus momentos y buen humor.


DESDE EL ALCAZABAR



AL NATURAL EN LOS JARDINES DE LA ALHAMBRA

2º día en Granada


A pesar del propósito bien intencionado de levantarnos a las 9 lo hicimos a las 10.00 y entre peinarnos acicalarnos, quitarnos los piojos unas a otras y.... un desayuno EXCELENTE preparado por la señorita que veis en la foto, salimos sobre las 12.00 o así; al salir, nuestra amada granadina nos llevó a una tetería (El Antiguo TOSTADERO 1908) que comparada con el TE SHOP de Madrid era mucho más barata (100 gr: 3,90 euros) nuestra amiga la florecilla se cebó comprando y oliendo cada uno, era muy graciosa, su frase preferida en el momento era: ¿puedo oler eseee? (¿y ese? ¿y ese? ¿y este? ) le hizo todo el negocio a la chiquita, que sabía mucho de tés. Yo compré té paquistaní, té negro con canela (se sirve con leche) y té verde flor de fuego (sabe entre manzanilla, vainilla y frutas rojas) los dos geniales.

Vagamos por el centro, vimos el ayuntamiento, la Plaza de colón (cuando le pide el permiso a la reina para "cruzar el charco") La catedral y las miles de pequeñas iglesias curiosamente decoradas de blanco y verde (bandera de Granada) luego visitamos el conservatorio superior de música, super bonito. Las fotos hablan a veces por sí solas.


Zancudo en la plaza de la libertad


El trío de las sonrisas en la escuela superior de música

Cerca de un molino de viento, son GIGANTES
Tienen la catedral detrás y se detienen en una tienda de catanas

Luego nos fuimos al camping Las Lomas, donde trabaja nuestra querida amiga, en un restaurante que nos cebaron un montón con la comida, parecía que luego nos querían comer. Afortunadamente no tuvimos ese destino y pudimos continuar nuestro viaje. Las vistas que había de ese camping son preciosas, me río yo de la Mujer muerta.

Al camping nos fue a recoger otro amigo granadino que conocimos en el camino de Santiago portugués, el cual nos llevó a las Alpujarras a un pueblo que se llama Pampaneira. Donde bebimos de una fuente de la cual salías con novio y te casabas, en realidad ponía novia, así que igual hay sorpresas.
Nos conquistó con esos paisajes montañeros y una caja de piononos propios de su pueblo Santa Fe, ¿la cuidad sin ley era? Parando en sitios preciosos cuyas fotos subiré más adelante, en Pampaneira compramos un regalito a nuestra amiga por ser tan buena anfitriona y por su cumple dentro de una semana. También pasamos por el suspiro del moro, cuando pierde Granada dice: aaay, y su madre (como buena madre que es siempre corrigiendo, aunque un poco machista la mora...) le regañó: no llores como una mujer lo que no supiste defender como hombre.

Mr. Rally con su coche sin luces, (la copiloto tenía una gran responsabilidad apuntando con una linterna a la carretera) nos llevó al centro de Granada, al mirador de San Nicolás, no San Lázaro como decía la Florecilla, donde se ve toda Granada de noche, iluminada, haciendo honor a su fama. luego nos llevó hasta la casa de nuestra amiga. Quien sorprendida y consternada recibió el regalo y lo colocó en la pared de su cama. la gran anfitriona nos preparó unas tapitas caseras y de lo llenas que estábamos no salimos de parranda y nos dormimos.

1er día: Granada lluviosa

El finde anterior nos fuimos 3 amigas madrileñas de viaje al sur de España, Granada y reencontrarnos con nuestra amiga granadina.

El primer día decidimos ir a Salobreña con tan mala suerte que diluvió, y el camino desde el centro del pueblo, donde te deja el bus hasta la playa era de unos 20 minutos, nuestro primer plan fue ir a comprar paraguas, cuando ya llegamos (aun con los paraguas, mojadísimas) entramos en un restaurante muy barato para estar donde estaba, y nos cuidaron bastante bien, con vistas al mar y a la montaña que hay detrás de este con su hermoso castillo. El reataurante se llama El peñón, el cual tiene una terraza en la propia roca, quedando el mar a 5 cm de uno.
A Salobreña hay que ir en día soleado para también visitar el castillo del que os hablo.

Después volvimos al centro y quedamos con la tercera madrileña, Layla. Tapeamos, siguiendo la costumbre típica granadina y nos fuimos a la casa de nuestra amiga, cuya calle le da nombre.

Pateamos Granada nocturna (y sus maravillosas teterías) y nos dormimos en seguida.

En la foto: La florecilla a la izq y nuestra granadina en el restaurante de Salobreña empapadas a causa de la lluvia